HISTORIA DE JACA
Los primeros habitantes de los
que tenemos noticias son un pueblo de origen prerromano llamado jacetanos. Más
tarde los romanos conquistaron la comarca y llamaron a la ciudad
"Iaca" de donde procede su nombre actual.
Jaca es conquistada por el conde
de Aragón Aznar I Galindo (entre 809-839), en el contexto de la Marca
Hispánica, creada por el rey franco Carlomagno como frontera defensiva de su
reino. Ramiro I (entre 1035-1063) se autoproclama rey de Aragón y establece su
capital en Jaca.
El hijo de Ramiro I, Sancho Ramírez (entre
1063-1094) concede a Jaca en 1077, unos fueros que harán que al amparo del
Camino de Santiago y con el establecimiento de una población permanente, se
convierta en una verdadera capital del reino y en sede episcopal y quien
comience las obras de la nueva Catedral. La titularidad capitalina la
ostentaría hasta el 1096 en que es conquistada la ciudad de Huesca a quien le
cede el testigo.
CATEDRAL DE JACA
La Catedral de Jaca cumple un papel
importante como marco áulico en el que el rey reafirme su poder y origen divino
de su mandato, este re pese a partir en desventaja territorial a la hora de
iniciar la conquista de la
península(los reyes d e
León y Castilla habían pactado
con las taifas de Zaragoza para impedirle su
expansión
por el valle del Ebro) se va a mover con habilidad en el ámbito diplomático su
viaje a Roma para obtener el apoyo del papa Alejandro II, a cambio de
introducir el rito romano frente a la liturgia mozárabe imperante en España y
sus matrimonios con princesas de origen francés le vana a
permitir acceder al trono de Navarra a la muerte de su primo el rey, unificando
ambos reinos en su persona.
Características
La construcción de la Catedral se realizó en dos fases:
la primera entre 1076 y 1086 con Sancho I Ramírez que marca el inicio de la
construcción y su planteamiento base y la segunda fase entre 1100 y 1131 con
Alfonso I el Batallador que marca la construcción definitiva del templo. Para
1139 la Catedral ya estaba finalizada según se infiere de una bula del papa
Inocencio II (entre 1130-1143).
La Catedral está construida con piedra sillar, en
estilo románico aunque tiene numerosas reformas posteriores. La Catedral se
desarrolla en planta basilical de tres naves y cinco tramos. Nave de transepto
no sobresaliente en planta pero si en alzado. La nave central más ancha y alta
que las laterales. La iluminación se realiza a través de ventanas abiertas en
los muros laterales de la nave central. El crucero se cubre con una cúpula
semiesférica que apoya en trompas con planta octogonal. Originalmente el templo
disponía de tres ábsides, pero en el siglo XVIII el central fue modificado
mientras que el situado en el norte fue prácticamente destruido, permaneciendo
intacto sólo el ábside sur. Dos puertas, la principal situada a los pies recae
a la plaza de San Pedro y la puerta meridional situada en la fachada lateral
recayente a la plaza del Mercado.
En el crucero se levanta un cimborrio octogonal con una cúpula
semiesférica de ocho
nervios de sección recta que descansan en modillones de
rollo, la
cúpula apoya en trompas que a su vez descansan en cuatro arcos torales,
lo que permite el paso de una superficie octogonal a otra cuadrada. En el
vértice de estas se pueden distinguir a duras penas, cuatro pequeñas figurillas
que son las cuatro representaciones simbólicas de los evangelistas: el toro
(San Lucas), el águila (San Juan), el león (San Marcos) y el ángel (San Mateo).
El exterior del ábside sur es el modelo que reúne todos los elementos
propios del románico jaqués. De planta semicircular, se estructura en tres
niveles separados por una imposta en forma del conocido como ajedrezado jaqués o cordón jaqués.
Este tipo de decoración se repite en el guardapolvos de la ventana y en el
alero del tejado que soportan los canecillos. Los canecillos son figurillas
zoomorficas y entrelazados, y entre cada uno de ellos se encuentra una
metopa con relieves.Dos columnas con fuste liso y capiteles corintios con adornos de bolas separan
el muro del ábside formando tres lienzos; en el central se abre una ventana
abocinada con arquivoltas en forma de baquetón. Estas apoyan en dos columnas de
fuste liso con capiteles decorados, uno de ellos con la figura de una lechuza y
el otro con un entrelazado que surge de la boca de un león. De las dos columnas
antes citadas una de ellas ha desaparecido al ser modificado el ábside central
en el siglo XVIII.
Fachada occidental es la principal del
templo, orientada al oeste y conocida como la Magna Porta. La portada está formada por arcos de medio punto abocinados en cuyo
tímpano encontramos un crismón trinitario, original por incluir el espíritu
santo. La portada formada por seis arcos abocinados en forma de baquetones y
aristadas que descansan en cuatro columnas y en las propias jambas del muro.
Los capiteles ostentan decoración de diversos tipos, uno de ellos con
decoración vegetal, otro representa a dos parejas de personajes, uno
de ellos lleva una vara y conversa con otro, se considera a estos personajes
como un maestro de obras que conversa con un obrero, en la otra cara del mismo
capitel dos hombres acarrean sillares. Los otros dos capiteles forman una sóla
historia, Daniel en el foso de los leones. En uno de ellos vemos como un ángel
encarga al profeta Habacuc que lleve alimento a Daniel que se encuentra en el foso de los leones. El ángel coge del cabello al profeta y lo lleva a
Babilonia por el aire para dar el alimento a Daniel. El cuarto capitel que hace
juego con el anterior nos muestra como Daniel pone al descubierto las tretas de
los falsos sacerdotes que lo han enviado al foso y como estos son castigados.
Los cuatro capiteles se atribuyen al maestro de Jaca.
El guardapolvos que protege la
portada está realizada a base del ajedrezado jaqués.
El
crismón trinitario formado por ocho brazos y tallado hacia el 1115,
es tal vez el más bello del mundo románico, se encuentra flanqueado
por dos leones afrontados, que simbolizan las dos naturalezas de
Cristo, la de vencedor y la de protector. El de la derecha cobija
entre sus garras a un oso y a un basilisco, representación de Cristo
como vencedor del pecado y de la muerte. El león de la izquierda
menos fiero, con la boca cerrada protege a un hombre que aparece capturando una serpiente , representa la bondad de Cristo que protege al hombre en su versión misericordiosa.
MUSEO DIOCESANO, inaugurado el 22 de agosto de 1970, se encuentra situado en las estancias que rodean el claustro de la catedral de Jaca.
La planta inferior ofrece un programa expositivo basado principalmente ne la pintura románica y gótica , que se muestra en el refectorio y la sala dedicada a las pinturas románicas de la iglesia de los santos Julián y Basilisa, en Bagüés, (Zaragoza). Las pinturas de Bagüé, realizadas entre 1080 y 1096, sn consideradas como una joya única del arte románico europeo. La planta superior está dedicada al gótico y a la edad moderna, destacando el frontal gótico del altar de la iglesia del Monasterio de Santa María de Iguacel.
JACA FORTIFICADA:
La posición fronteriza de Jaca hizo que contase con fuertes murallas y castillos, la muralla se derriba en 1915 para ampliar la ciudad pero permanecen los castillos. El Castillo de san Pedro de Jaca es el principal exponente de esta Jaca fortificada. Felipe II ordenó su construcción en la Europa de las guerras de religión par defensa del territorio. Muy posterior es la defensa de la línea del ferrocarril que se extiende desde la frontera hasta Jaca: el fuerte de Col de Ladrones y la Torreta de Fusilería (amboS en Canfranc), y el fuerte del Rapitán se construyen a finales del XIX y principios del XX para tener a tiro la línea férrea ante una posible invasión francesa. La Guerra de la Independencia estaba muy reciente y los miedos a los franceses propiciaron esta línea Maginot francesa.
CIUDADELA DE JACA. El diseño de a ciudadela debía resistir el ataque de artillería por lo que se diseña siguiendo los modelos italianos en forma de pentágono regular con los vértices reforzados, un foso perimetral, caminos protegidos y baluartes avanzados. Fue proyectada por el prestigioso ingeniero militar italiano Tiburzio Spanocchi, y se concibió como eje central de una tupida red de defensas pirenaicas en las que se integraban las torres de Ansó, Hecho, La Espelunga (Canfranc) y santa Elena (Biescas-Valle de Tena) más los castilletes de Berdún y Canfranc. Su ubicación entre la ciudad medieval y el río Aragón, extramuros, no fue bien recibida inicialmente por los jaqueses, que consideraban su construcción una amenaza para sus fueros y privilegios. Las obras comenzaron a mediados de 1592 y un año después estaban ya prácticamente finalizados los trabajos del exterior, a falta de su revestimiento con piedra sillar. En el interior se habían levantado los cinco cuarteles que albergarían a los 300 hombres de la tropa.
En 1613, y bajo el reinado de Felipe III, se concluyó la portada de acceso. Sin embargo fueron más lentas la sobras de excavación de los fosos y otros proyectos colaterales, que todavía continuaban en el tramo final del siglo XVII.
En torno al inmenso patio central se alinean los edificios destinados a albergar la guarnición, oficinas, almacenes y pertrechos, organizados en cinco manzanas para lelas a las cortinas o murallas. en el interior se encuentra también la capilla castrense de San Pedro, edificio barroco con portada de piedra construido en la segunda mitad del siglo XVI. La Cudadela solo fue utilizada defensivamente durante la Guerra de la Independencia. Pero paradójicamente fueron las tropas francesas las que se hicieron fuertes en su interior tras conquistar la plaza. Ocuparon la fortaleza cuatro años.
PUENTE DE SAN MIGUEL. Situado junto a la carretera que conduce al valle de Aísa, en la salida de Jaca, sobre las aguas del río Aragón.
.