miércoles, 15 de julio de 2015

Impresiones de los caminantes. Julio de 2015.


IMPRESIONES DE LOS CAMINANTES. JULIO 2015.



CARLOTA.  El Camino me ha hecho superar mis límites y conocer
mejor a mis compañeros.
Carlota (con MARTA y  M. LUISA en la foto) fue una muestra de
superación continua, y si no....que pregunten a sus pies.
MARTA Y NICOLÁS  Caminantes en buena armonía, a pesar de ser tan distintos, silencioso él, risueña y dicharachera ella.

MARTA. El Camino me ha servido para reflexionar,para darme cuenta de lo realmente
importante de la vida y aprender a valorar cosas que
en nuestro día a día ignoramos.
También he aprendido el significado de ser peregrino,
tener fortaleza, procurar tener siempre una sonrisa en la cara
y apoyar y animar siempre a los compañeros.
Estoy segura de que lo voy a repetir.


NICOLÁS. Para mi el Camino es una metáfora  de la vida, aunque en ésta no 
haya flechas amarillas que indiquen el camino que debes tomar.
Algunas mochilas pesan más que otras, pero todos los peregrinos cargan con la suya.
Cada día, mediante el esfuerzo y la constancia, se dan los pasos necesarios 
para llegar al albergue, sin importar el cansancio, la sed o el calor. 
Hay veces en las que un compañero de camino podrá darte agua o llevarte la mochila
durante un rato, pero nadie puede tirar de ti. Lo más importante a tener en cuenta 
es que no es una carrera, siempre puedes pararte a descansar y esperar a la siguiente persona.
Le doy la palabra a nuestro  amigo Antonio Machado que nos invita a ir ligeros de equipaje. Seguid caminando.




MANUEL. El Camino no es solo el sendero con flechas amarillas que vas siguiendo con tu mochila, es algo más abstracto. Ha sido una semana en la que, pese a las ampollas, dolores de pies, madrugones y San Juan de la Peña, vives un montón de experiencias inolvidables, aprendiendo tanto como en una asignatura de clase y conviviendo con gente a la que solo saludabas en el pasillo. Eso es el Camino, un conjunto de experiencias personales que hacen que el camino de  cada persona sea distinto y en el que te das cuenta que el todo es algo más que la suma de sus partes. Esperadme para ir el año que viene.




PILAR. Querido Camino de Santiago:
Solo quería darte las gracias por estos 8 días que creo que ninguno de tus caminantes olvidaremos.
Lo cierto es, que mucha gente te critica, cuántas veces habré escuchado que el Camino es solo andar 30 kilómetros para llegar a una ciudad e irte, y sí, básicamente era eso.
Pero también es cierto que detrás de esos 30 km. hay una historia, hay miles de anécdotas, ampollas, risas, lágrimas, personas que no conocías y que al final han sido imprescindibles.
Porque así eres, sorprendente e increíble.
Gracias Camino de Santiago 2015.



JULIA. Ha sido un viaje super especial que no solo fue caminar,
sino pensar, reflexionar y convivir con gente que nunca pensarías
que fuera tan maravillosa. Espero poder repetir porque experiencias
como esta no se deberían vivir solo una vez.

PAULA. Creo que el Camino
es una experiencia única,
en la que convives con
la gente, reflexionas,
contactas con la naturaleza.
Aunque al final del trayecto acabes
físicamente mal, te merece la pena.
Es una experiencia que me gustaría, y
espero, volver a repetir.











ELENA. El Camino, una experiencia
 única  e irrepetible.
Un cursillo intensivo de cómo
curar ampollas
 (en mi caso de como aguantar
 que me las cosan),
 que salen por la subida al monasterio
 de San Juan de la Peña,
que, segúun Pedro, se veía
y sólo quedaban tres kilómetros.....
A pesar del contratiempo
de las ampollas, repetiré experiencia.




PAULA Y ELENA. Siempre a buen ritmo y sonriendo,
atentas a todo y a todos.
MARÍA LUISA Y SARA dispuestas a salir
las primeras después de refrescarse en la fuente.
SARA. Para mí ha sido un camino muy duro,pero me ha enseñado a conocer
y superar mis límites y conseguir metas
que antes no me veía capaz de hacer.
Algo valioso que también me ha enseñado es a curar ampollas.


MARÍA LUISA. El Camino de Santiago y sus piedras, subidas
y bajadas, han sido como la penitencia de todas las
cosas malas que he hecho durante este año, más me vale
el año que viene no hacer nada malo para no tener que pasar
por lo mismo. La convivencia te abre puertas, te enseña cosas
de los demás, y te ayuda a prender que tus límites no están
siempre donde tú crees que están.
Gracias al Camino he aprendido que aunque tú mismo digas
"no puedo", por cada paso que das quejándote,
ya te estás contradiciendo.

TERESA. Como ex-alumna e incorporación última a este grupo, he de reconocer
que esta semana me imponía bastante.
Un grupo totalmente nuevo, un tramo del Camino realizado solo por el 3%
de los peregrinos y una ola de calor amenazante, suponían todo un reto.
De distintas maneras el Camino nos llevó a nuestros límites, a descubrirnos un poco más
a nosotros mismos y a los demás.
Y así es como puedo decir que me fui con los profes
y un grupo del cole, y volví con un grupo de amigos, a los que no me quedda
más que darles las gracias de nuevo y desearles "¡Buen Camino!",
 en el que tienen ahora por delante.




TERESA, con su trotecillo característico, BLANCA, con su "blastón",
 seguidas por PAULA Y PILAR, dos buenas andarinas.


Y LOS PROFES...



BLANCA. En el Camino te das cuenta de que son pocas
las cosas que realmente necesitamos para vivir: un "blastón",
en el que apoyarte para superar los momentos duros, las cuestas arriba
y las cuestas abajo...Un sombrero para protegerte de los elementos adversos
y que a la vez te reconforta y te hace sentir bien.
Y , como no, ¡la mochila! en la que cada uno carga con sus
cosas imprescindibles, aquello de lo que no podemos desprendernos.
¿Quiénes son nuestros blastones, sombreros y mochilas  en nuestro día a día?

BLANCA, JULIO, PEDRO Y ANA, tomando un vinito navarro en Estella.
El Camino tiene momentos para todo, y para todos.




PEDRO. El tiempo que lo va diluyendo todo seguro que le costará
que se pierdan recuerdos  anclados en imágenes como estas,
el agua siempre aparecía en forma de pilones, de charcas,
de fuentes, y sobre todo de esas guerras de agua
que tanto nos servían para reir, el año de las risas.

JULIO. El Camino de Santiago es un viaje al interior de uno mismo
. Una experiencia inolvidable.
Animo a todo el mundo a realizarla.
Julio no perdió el buen himor en ningún momento, a pesar de las ampollas
tan espectaculares. Experto en curas de pies para todos.





PEDRO con JULIA, CARLOTA, PILAR TERESA Y PAULA en Undués de Lerda,
donde los caminantes degustaron deliciosos bocadillos y se
refrescaron en el lavadero.

Y ANA. La autora de este blog, blog que no existiría sin vosotros, caminantes, y  sin
la felicidad del Camino.  Felicidad de llegar a los pueblos andando,  los vas viendo
acercarse a cada paso, para luego recorrer sin prisas sus callejas.
Felicidad de disfrutar la naturaleza, con la dureza esta vez de un sol plomizo
que ha puesto a prueba nuestra resistencia.
Y felicidad de llegar cada día a una meta, porque en el Camino no hay una sola,
cada peregrino tiene la suya.
(Lo malo es que la felicidad engorda.)
Gracias, caminantes, por haber compartido el Camino con nosotros.

5 comentarios:

  1. Ana eres especial. Positiva, luchadora.trabajadora incansable, culta y sobre todo generosa de corazón. Gracias por tu compañía en éste mi primer paso en el camino.
    Blanca, parlanchina, atenta, tímida y divertida a la vez. Gracias también por soportarme.
    Pedro, siempre con la risa preparada, positivo y marchoso. Tus charlas técnicas impresionantes. Gracias a ti también.

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  2. Felicidades a todos.
    Y gracias por permitirnos compartir vuestra experiencia con tan bonitas imágenes y textos llenos de sinceridad y sabiduría.

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  3. Muchas gracias a todos. Sin poder ir nos hacéis un poco compartir este vuestro camino.

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